domingo, 13 de febrero de 2011

UN FIN DE SEMANA CUALQUIERA

Un fin de semana cualquiera, me siento como en una cárcel, sin ver ni oír a nadie, cuanto me gustaría poder ver a mis hijos, abrazarles preguntarles que nos esta pasando, o que nos a pasado, porque hemos llegado a esta situación tan desagradable, me gustaría decirlos que los quiero, que los necesito, que es muy duro ver como pasan los días sin saber nada de ello, que no me atrevo a llamarles por que no se como van a responderme.
Me estoy perdiendo ver como crece mi nieto, el jugar con el como antes lo hacia, me siento una cobarde por no atreverme a presentarme en su casa para verle, por que temo como reaccionaran sus padres, ya que el día de su cumpleaños, llame para ir a felicitarle y su  respuesta fue deja lo para otro día, es por eso que no me decido a ir y por que no quiero que mi nieto vea ninguna discusión.
Pero no por eso voy a dejarle de querer, al contrario cada día le quiero con mas fuerza, le hablo en mi soledad y silencio le digo que le quiero, que no me olvide que estoy aquí, que me gustaría abrazarle, que deseo que esto acabe pronto que no soy tan mala.
 A mis hijos les diría que intenten comprender me, que no me juzguen sin escucharme, que se apollen los tres hermanos, que cuiden de sus mujeres que las quieran y las respeten, para que no les pase lo que a sus padres, por que por mucho que les diga esto es muy duro, y siento que aya tenido que acabar asi, pero yo ya no podia mas. Nunca olvideis de que os quiero mas que a mi vida.    Alfonsi

jueves, 3 de febrero de 2011